Según datos del Decanato, cada uno de los 33 juzgados de instrucción de Barcelona emiten entre 600 y 700 sentencias por faltas al año, lo que supone más de 18.000 si se cuentan todos.
La propuesta de la consellera de Justícia, Montserrat Tura, para que
los juzgados abran todo el día no es ninguna novedad para los 33
juzgados de instrucción de Barcelona. La Sala de Govern del Tribunal
Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) acordó que el juzgado de
instrucción de guardia para celebrar juicios de faltas celebre 34
vistas al día, 17 por la mañana y el mismo número por la tarde. De esta
forma se quiere rebajar el tiempo de citación de estos juicios, ya que
en el último año han pasado de celebrarse unos 15 días después de
cometer la falta a unos 40 días, como pasa actualmente. El fuerte
incremento de hurtos, sobre todo en zonas centricas y, especialmente, a
turistas o comercios, han hecho disparar este tipo de juicios de faltas
y han desbordado los juzgados.